jueves, 5 de junio de 2008

La importancia de tener un blog cerrado. Pero no borrado


Hace ya más de tres años comencé en esta historia de los blogs. Mucho más concurrido que éste -sí, bueno, quizás dos o tres personas, básicamente sigue siendo lo mismo-, aguantó un añito conmigo, un año en el que actualizaba cada día e incluso, de vez en cuando, varias veces al día.
Mi inspiración era tal que me llevó a depurar la técnica e incluso pensar que podría dedicarme a la escritura como modo de vida. Pero, un día, después de un año, decidí dejar el blog, puesto que todo lo que había motivado su creación quedaba obsoleto.

Los motivos de su creación fueron bien sencillos. Por un lado un empujoncito que mi buen amigo Juanma, el científico loco, me dio, puesto que él ya tenía uno y era un mano a mano entre los dos, escribiéndonos, postrándonos y por supuesto, inspirándonos.
Por otro lado el amor, claro está. O mejor aún, el desamor. Surgió en el momento crucial en la creación del blog e impregnó muchas líneas en él. El protagonista se llamaba Carlos, una persona hedonista, insensible y con poco respeto hacia el sexo femenino. Alguien que, como no podía ser de otra manera, no tiene nada que ver conmigo. Pero yo creía que sí y me dediqué a llorarle en repetidas publicaciones provocando más de un momento de bajona, pero también grandes producciones creativas.

Pasión en estado puro. Sentido, sentimiento y por qué no, muchas dosis de drama. Es lo que he sentido al leer lo primero que escribí pensando en él. Que equivocada estaba...
Aunque me parezcas un ser repugnante, cosa que estoy segura sabes y aunque sé que nunca verás ésto, creo que, con el tiempo, has llegado a respetarme. Y yo, te doy las gracias por existir, maldito hijodeputa.
Con toda la acritud del mundo, copio integramente -con sus fallos y todo- este primer "desahogo".


A medianoche

A estas horas de la noche, cansada, te me apareces distinto, distante, indiferente. A estas horas, pícara sonrisa al recordarte aparece; hoy no me importas, no tengo esa sensación en el estómago, ese pinchazo continuo que contrae y retrae mis ganas, mis ansias de vivir.
Hoy no te espero, puedo escuchar las canciones que me prestaste y dejar que entren en mi vida, siendo meras piezas más que forman mi vida. Has sido algo, hoy aún lo sigues siendo, pero en noches como esta, al recordar nuestros recuerdos hoy no, hoy no me dueles.

Suena otra canción; A song for the Lovers, como los amantes que un día tu y yo fuimos... y nunca más seremos. Cuando sueño no oigo canciones, únicamente aparecen los fantasmas de mi pasado, aquellos que como tú, puñal en mano arrancasteis y os llevasteis como trofeo un trozo de mi corazón. Porque me guste o no, yo, infeliz mortal soy todo corazón. Y tú, que no has sido ni el primero ni el último y mucho menos el más importante, aquel al que nunca he querido y amado como a otro hice, me dueles igual.

Y despierto; y despierta te apareces igual que la primera vez: recorro tu cuerpo, empiezo por tu pelo, suave seda que siempre tocaba. Me encantaba. Ahora, de cuerpo entero tu atlética figura, tu torso, tus manos, tus piernas, todo perfecto. Me detengo; lo hago en tu cara, tu no perfecta cara. Deslizo mis dedos por tus labios, dibujo tu nariz, beso tus ojos... Ahí termino, te miro y me miras y por unos segundos no existe nadie en el mundo: sólo tus ojos y los míos.
Y nos amamos con la mirada de la forma tan salvaje como un día hicimos, pero todo ha cambiado, algo es distinto. A estas horas de la noche aparto mi mirada, le sonrío a tu cuerpo, disfruto fumando en mi ventana, escribo declaraciones de intenciones que, quizás algún día leas.

Amado mío, sabes quien eres, no puedo ocultarlo, transparente como el mar desnudo mi alma para que algún día me veas y puedas, sin preguntarme sentir que todo lo que escribo se cumple; y que ya no seas nada.
Hoy sonrío y cambio papeles, tu, alma desdichada sin rumbo, yo, decidida y grande ante el mundo... pero no lo quiero, no quiero ser tu, quiero con lo que sé y lo que he sabido, seguir y en noches como esta sonreír y creer por unas horas, que todo es posible.
Buenas noches.


From: www.natnatnatcking.blogspot.com

No hay comentarios: